En la historia del Partido de Chivilcoy han ocupado el Despacho Oficial de la Municipalidad intendentes de diversos colores políticos, muchos de los cuales acostumbraban a hacer "deslumbrantes y hasta casi faraónicos anuncios".
No vale la pena perder tiempo en citar nombres, muchos de los cuales comulgan con la ineptitud como tarjeta de presentación. Hablar de ellos sería darle chapa de "próceres", aunque algunos igualmente se lo creen. Y menos, aún, debemos detenernos en citar sus "obras".
Pero, a raíz del reciente anuncio del intendente municipal, quien dijo que en los próximos días la localidad rural de Henry Bell tendrá energía eléctrica por primera vez en 112 años, bien vale preguntarnos:
¿ Con qué sentido de pertenencia gobernaron los anteriores intendentes, sabiendo que a veinte kilómetros del "preciado despacho" había vecinos que no tenían energía eléctrica ?
¿ Sería que Henry Bell no sumaba votos para las campañas y, en consecuencia, había que despreciar a aquellos pocos vecinos ?
¿ O su escasa perspectiva política no les daba más que para pensar que Chivilcoy terminaba en los límites de las rutas nacional 5 y las provinciales que lo rodean ?
Han pasado 112 años de la creación de Henry Bell.
Nadie se encargó de darle energía eléctrica a un pueblo rural que esta a escasos 30 minutos del centro de la ciudad, en el cual también viven vecinos, igualmente chivilcoyanos.
Nadie es ningún intendente antes. Llámese como se llame. Sea Peronista, Radical, de Facto, de Izquierda, de Derecha, lo que fuere.
Nadie es ninguno. Extraña coincidencia de ineptitudes, de falta de solidaridad, de reconocimiento de derechos y hasta de incumplimiento de los deberes de funcionario público.
Tal vez algún ex mandatario local de auditiva sensibilidad se ofusque al sentirse tocado y levante su olvidada y gastada voz. Bienvenido. El pez por la boca muere.
Guillermo Britos -criticado por algunos, querido y admirado por otros- acaba de anunciar que en pocos días cumplirá con un derecho elemental: dar energía eléctrica a un olvidado pueblo rural de Chivilcoy para bienestar de sus vecinos y de todos los que quieran habitar ese lugar. Britos no hará otro cosa que cumplir con su palabra, con su promesa de 2017. Un gesto que valoran los hombres y mujeres bien nacidos.
El intendente se ha ganado un gran lugar en la historia de Chivilcoy. Será el hombre que –luego de 112 años- llevó la luz a ese poblado rural donde viven, trabajan y sueñan otro montón de chivilcoyanos.
Britos les ha dado a esos vecinos la posibilidad de soñar ahora con más ganas.
Ciento doce años después, verán la luz por primera vez.
Esa misma luz que los antecesores de Britos –ex intendentes- jamás quisieron que se encienda.