Tras la denuncia publicada por este diario en las últimas horas, poniendo de manifiesto la queja de numerosos vecinos de nuestra ciudad que están recibiendo las boletas de EDEN, por el servicio eléctrico, con dos vencimientos en menos de treinta días, la catarata de reclamos y el malestar se ha multiplicado exponencialmente.

Al haber tomado estado público la irregularidad, muchos fueron los usuarios que ahora comenzaron a observar la anormalidad, que hasta bien podría llegar a considerarse un acto defraudatorio si lo relacionamos jurídicamente con el vínculo de confianza entre las partes.

El acortamiento de las fechas de vencimiento comenzó a detectarse en los últimos meses del año anterior en algunos usuarios y se ha ido intensificando en forma notable recientemente, en el comienzo del 2019, al extremo de que la situación ya está casi generalizada en la ciudad. Es como si la empresa EDEN hubiese estado probando poco a poco la reacción de sus clientes y ahora ha dado rienda suelta a semejante abuso.

La boleta que publicamos más arriba -resguardando identidad- ilustra a las claras el irregular e improcedente accionar de la empresa. Indica que la liquidación vence el 2 de enero de 2019 y advierte que el próximo vencimiento es el 29 de enero, o sea 27 días después, sin respetar el período mensual de 30 días. En otros casos comprobados, hay boletas que vencen con 20 días de diferencia.

La situación afecta a jubilados, comerciantes, casas de familia, industrias. Nadie se está salvando de la voracidad dineraria de la Empresa EDEN que, más allá de monopolizar el servicio eléctrico, que suele caracterizarse por notables deficiencias en nuestra ciudad, ahora ha comenzado a someter impiadosamente a los usuarios con facturas cuyo vencimiento se establece de forma arbitraria y hasta maliciosamente, si tenemos en cuenta las serias dificultades que los vecinos deben enfrentar para abonar los desproporcionados valores por servicios públicos de calidad discutible.

CRITICAS A DEFENSA DEL CONSUMIDOR

Numerosos usuarios afectados por la imposición "de facto" de EDEN, en determinar dos vencimientos en menos de 30 días, coincidieron en alzar sus críticas hacia la oficina de Defensa del Consumidor, identificada en Chivilcoy como Oficina Municipal de Información al Consumidor (OMIC), cuyo responsable es el señor Joaquín Oteiza, por su falta de acción frente a la circunstancia que afecta a miles de usuarios y que muchos ven como una explícita protección a la empresa.

Indicaron al respecto, que la OMIC debería actuar de oficio en representación de la comunidad y ocuparse debidamente de la cuestión, derivándola a quien corresponda, en caso de que sus facultades no le permitan accionar directamente para resolver la problemática.

Acerca de la inacción de la OMIC en esta situación, que ya afecta a casi toda la comunidad de Chivilcoy, algunos profesionales consultados al respecto indicaron que la dependencia debe hacer prevalecer, entre otros derechos esenciales de los consumidores, el punto 7, que inequívocamente prevé el "Derecho a la protección de sus intereses económicos: que su patrimonio, recursos e intereses económicos no se vean afectados ni menoscabados por la conducta del proveedor".