Por Santiago Zunino.

A medida que pasan las horas, crece el escándalo desatado por declaraciones periodísticas formuladas en las últimas horas, por la presidenta del Concejo Deliberante de Chivilcoy, doctora Patricia Mangino (foto), a través de las cuales denunció públicamente que ese Cuerpo Legislativo tiene empleados "ñoquis", que perciben sueldos muy elevados y nunca van a trabajar.

La doctora Mangino dijo que los involucrados tienen "padrinos políticos" que los protegen y apuntó, principalmente, al Partido Justicialista, de donde ella misma proviene.

Con sus afirmaciones, sacó a la luz una situación irregular y muy grave, que ha causado profundo malestar en distintos sectores de la comunidad local, incluido el ambiente político, que se vio sacudido, afectado y señalado.

Las declaraciones de la presidenta del Concejo Deliberante, impregnadas de fuertes acusaciones, han llamado poderosamente la atención, porque Mangino siempre ha tenido un perfil políticamente moderado y, además, las hace públicas a poco de dejar la titularidad del Cuerpo, en diciembre próximo.

En momentos difíciles, donde Chivilcoy, en su conjunto, sufre las consecuencias de una interminable crisis económica y laboral, con enorme demanda de fuentes de trabajo, la denuncia cayó como un balde de agua helada y sorprendió al grueso de los vecinos, que mostraron indignación y enfado, al tomar conocimiento de tan repudiable proceder, que afecta al patrimonio de todos los contribuyentes quienes, con sus aportes, sostienen la estructura gubernamental de la ciudad.

El solo hecho de conocer de boca de una alta funcionaria, que en Chivilcoy hay empleados que cobran y no trabajan, mientras otros buscan -casi con desesperación- alguna ocupación que les permita subsistir, provoca rechazo.

Las declaraciones

La doctora Mangino reveló la irregular situación del personal del Concejo Deliberante, en declaraciones que formuló al colega "La Gaceta del Oeste".

"Hay empleados nombrados, que deberían cumplir con los horarios. Hace un año y medio que estoy en la Presidencia y los estoy llamando y no puedo lograr que vengan", expresó la titular del Concejo Deliberante.

Según la citada publicación, "Mangino optó por no revelar la identidad de esas personas".

Sin embargo, dio una clara orientación acerca de quienes serían los involucrados en la cuestión, al afirmar categóricamente: "Son del Partido Justicialista y de otros partidos; no me conocen la cara ni yo a ellos y están percibiendo una cifra bastante elevada para no venir nunca. Tal vez éstas personas tienen padrinos políticos que los hacen sentir con una gran impunidad y es difícil de cambiar".

"Considero -agregó Mangino- que hay gente que cobra sueldos importantes y que no cumplen con sus horarios. Traté y trato de convocarlos y no vienen nunca. No es gente que tomé; es gente que estaba dentro del Concejo y uno trata de que cumplan con el sueldo que se les paga. Al no querer cambiar el reglamento, beneficiaron a todos los que no vienen a trabajar".

La funcionaria fue mas precisa aún, al sostener que el Concejo Deliberante de Chivilcoy tiene 40 empleados y añadió: "Tuvimos la intención de utilizar el sistema de huella digital, para llevar un control de los horarios. Tengo una persona de Recursos Humanos que se encarga de ese tema, pero no fue sencillo, porque el que quiere cambiar las cosas es el que no está bien visto, es vigilante, traidor, desleal y por supuesto yo soy todo eso; por intentar implementar esto. A la gente le cuesta, porque como nunca se hizo y están acostumbrados así, dificulta implementarlo".

Es oportuno recordar que Mangino obtuvo una banca en el Concejo Deliberante a través del propio Partido Justicialista (PJ CUMPLIR), el mismo sobre el que ella, ahora, hace pesar la acusación de tener trabajadores "ñoquis" en el Poder Legislativo local.