¿QUÉ LE PASÓ AL CLUB SOCIAL?

¿QUÉ LE PASÓ AL CLUB SOCIAL?

Por Santiago Zunino.
El Club Social de Chivilcoy siempre se caracterizó por ser una institución diferente, de esas que suelen calificarse como "de categoría", solo reservada para una determinada "elite", un grupo selecto y minoritario de personas.
Así fue durante casi toda su vida.
Salones resplandecientes; porteros distinguidos y cuidadosamente preparados para la tarea y la estricta prohibición de no dejar entrar a nadie que no sea socio de la casa, una actitud incomprensiblemente discriminatoria -que se mantuvo durante años- hasta con aquellos visitantes que se acercaban con el único fin de conocer las instalaciones de tan elegante lugar.
En sus años de gloria, muchos vecinos con ánimo y las buenas intenciones de acercarse al Club, tuvieron que soportar la mirada peyorativa y la actitud displicente de aquellos que, por entonces, guiaban los destinos de la institución.
El Club Social fue fundado en mayo de 1881. En julio de 1907 le otorgaron la Personería Jurídica. En 1909 fue adquirido el edificio que ocupa actualmente, en San Martín 24, lugar en el que antes había funcionado el Banco de la Nación. En 1960 fue restaurado y embellecido.
Según recuerda el Archivo Literario Municipal, el Club Social de Chivilcoy, "se convirtió en un escenario esplendoroso, de relevantes y memorables acontecimientos para la historia de nuestra ciudad".
Han transcurrido 138 años de historia.
Hoy el Club Social carece de fondos para arreglar los techos, las paredes y los baños. "Estamos remando desde hace varios años; todo a pulmón para refaccionar el club", dijo el actual presidente, Gustavo Cantone y debió pedirle plata a la Municipalidad para que auxilie a la institución.
¿Qué le pasó al Club Social para llegar a esta situación?
¿Tan calamitosa ha sido la herencia dejada por aquellos hombres de alcurnia, miembros de familias ricas y tradicionales de la clase más alta y poderosa de Chivilcoy, que ostentaban su reluciente figura en las instalaciones del Club?
Por primera vez en su historia, el Club Social de Chivilcoy acaba de recibir ayuda municipal, a través de un subsidio. Ésto, también lo confirmó Cantone, quien comentó: "El intendente me atendió y me dijo que no iba a haber problemas para ayudarnos; que presentáramos lo que nos hacía falta para dejar a la institución como en sus mejores años".
La respuesta fue casi instantánea. El intendente Guillermo Britos -hombre solidario y de palabra- le entregó un cheque por $ 80.000, incorporando al Club Social a la nómina de entidades deportivas que reciben ayuda de la comuna.
Cantone agradeció la ayuda conmovido y dijo: "Queremos un club abierto a la comunidad; por eso ponemos a disposición las instalaciones de la planta baja para actividades y sobre todo para el municipio, que es la primera vez, en nuestra historia, que realiza una colaboración de esta forma".
El intendente redobló la apuesta y afirmó: "Ésta no será la única ayuda económica para el club. Una vez que rindan este monto, veremos las posibilidades del municipio y entregaremos una nueva suma, porque sabemos que siempre hace falta".
Luego de 138 años de vida institucional, el Club Social de Chivilcoy decide "abrirse a la comunidad" y recurre a ella -a través de su Municipio (que es de todos)- para intentar subsistir.
Tal vez, empujado por el abandono al que ahora lo sometieron algunos de los "ilustres vecinos" que supieron conducir su destino; quizá castigado por la cruel realidad económica nacional o posiblemente entendiendo -tardíamente- que una institución que forma parte de la comunidad, se debe íntegramente a ella.
Bienvenido el cambio integrador del Club Social de Chivilcoy, así sea para hacerle honor a su propio nombre: SOCIAL es aquello perteneciente o relativo a la sociedad que, en nuestra ciudad, somos TODOS, sin excepciones.
El presidente del Club Social, con las autoridades municipales, al momento de recibir la ayuda económica.