La falta de agua en diferentes zonas de Chivilcoy, fue la queja coincidente de numerosos vecinos, durante la agobiante jornada de este sábado 26 de diciembre.
En algunos sectores se notó baja presión, pero en otros, directamente, no salía una gota de la canilla. Ni un mísero chorro para refrescarse frente al insoportable calor.
La situación causó el entendible malestar y las quejas se multiplicaron por el deficiente servicio que presta en nuestra ciudad la empresa Aguas Bonaerenses.
ABSA viene recibiendo críticas justificadas desde hace años, por la deplorable prestación que brinda en nuestra ciudad.
Al hecho de entregar agua de calidad perjudicial para consumo humano, ahora le suma la escasez total del vital elemento, tan necesaria para otras necesidades personales.
Mientras tanto, en un mensaje rayano con la más absoluta hipocresía institucional, ABSA pregona que "en el actual contexto de pandemia, la empresa asegura la prestación en más de 50 distritos de la provincia de Buenos Aires". No menciona a Chivilcoy.
Paralelamente, sostiene que "en el marco de la emergencia sanitaria, ABSA apela al compromiso de todos en el sostenimiento de un servicio esencial".
Por lo pronto, en Chivilcoy, la empresa estatal bonaerense no debería pedir compromisos a sus clientes; por el contrario: debería asumirlos y cumplir eficientemente con un servicio por el que cobra valores desproporcionados.
Así las cosas -créase o no- a horas de iniciar el año 2021, Chivilcoy registra 34 grados de temperatura, con vecinos que no tienen acceso a una gota de agua.