Mientras que en Chivilcoy los casos de Coronavirus no descienden sino que -por el contrario- manifiestan una tendencia a incrementarse, la ciudad no ha recibido más vacunas anticovid para continuar inmunizando.

Lo confirmó hoy el secretario de Salud.

El doctor José María Caprara dijo algo que -lamentablemente- ningún chivilcoyano hubiese querido escuchar.

Caprara fue lacónico en su expresión: "No se han recibido vacunas durante la semana".

Dicho en otras palabras: en forma inminente, vamos camino a quedarnos sin dosis para seguir administrando.

Estamos a un paso de que se agote el ínfimo stock que se recibió.

Según se supo, en el Hospital Municipal aún hay un remanente escaso de segundas dosis. Eso es todo lo queda.

Se suman a esta situación 20 nuevos casos de COVID, confirmados en las últimas horas.

Entre ellos hay dos niños de 2 y 6 años y uno de 13 y se esperan 56 resultados de las personas hisopadas este jueves 25 de marzo.

La inquietante situación, derivada de la falta de vacunas, pone a la comunidad local al borde de un futuro incierto, si en forma inmediata no se reciben más inyectables.

Hasta el momento, una escasa cantidad de vecinos fue beneficiada, mientras que la gran mayoría aguarda esperanzados -o ilusos- ser llamados a vacunarse.

Están librados a la suerte.

Chivilcoy es el reflejo de la Argentina misma.

La ciudad marcha a la deriva, dentro de este sombrío panorama sanitario.

Los vecinos solo deben conformarse escuchando repetitivos consejos, sobre los cuidados que deben implementar para no contagiarse.

El discurso aburre.

Más de un año el mismo monólogo.

¿Acaso las autoridades no entienden que, en pandemia, las palabras no curan?