La idea fue recolectar útiles escolares para ser donados a establecimientos educativos de nuestra ciudad, los cuales serán usados por alumnos de escasos recursos.

El loable objetivo fue suficiente para que el cuartel del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Chivilcoy, en la calle Pueyrredón, se convirtiera en un gran escenario de música, baile, ritmo y solidaridad.

Armaron un zumbathon, bajo la conducción de las instructoras Cintia Serio, Nazarena Palumbo y Candela Speranza.

Lograron una gran convocatoria, con una activa participación, juntaron muchos útiles y hasta un pasaje con baile bomberil (foto) se convirtió en una gran atracción del espectáculo.

La llama de la solidaridad se encendió una vez más y los bomberos dejaron que se propague, porque el maravilloso fuego de la ayuda, estimula y contagia.