Ismael Aronne, uno de los más veteranos hombres de los medios de nuestra ciudad, murió este lunes.

Se hallaba internado en el Hospital Municipal por COVID.

Coincidencia, cosas del destino o -tal vez- por íntima convicción, eligió transitar su viaje final en el Día del Periodista.

Acaso fue un tributo a la profesión que amó y por la que vivió, gozó, sufrió y peleó durante toda su vida.

Nunca descansó; sentía demasiado lo que hacía.

Paseó su pasión por el comentario y el relato deportivo, a través de los micrófonos de Radio Chivilcoy durante décadas, junto a los recordados José Ramón Ponce y Livio Balducci, entre otros.

Sus pinceladas periodísticas también tuvieron lugar en las páginas del Diario La Razón.

No se permitió pausa en su labor periodística.

Hizo escala en otros medios, hasta convertirse en empresario de la radiodifusión.

Era licenciatario de Radio Local 103.7.

Encerraba un corazón enorme como la estatura de su cuerpo.

Ahora, en los micrófonos del cielo, Ismael Aronne tendrá la posibilidad de relatar la felicidad de haber vivido tal cual lo soñó.

Néstor Berrutti