A pesar de los insistentes reclamos hechos por las autoridades municipales, para que los vecinos eviten arrojar a la vía pública elementos que puedan obstaculizar el normal escurrimiento de las aguas y así evitar inundaciones debido a los pronósticos de lluvias, la desaprensión de algunos no deja de hacerse evidente.

En las últimas horas, estas actitudes reprochables e indignantes -claro ejemplo de irresponsabilidad ciudadana y carencia de colaboración- fueron lamentablemente comprobadas por los operarios de la Comuna.

Las cuadrillas, que realizan intensas labores para limpiar las zonas más críticas y facilitar el rápido drenaje, ante la eventualidad de una copiosa precipitación pluvial, encontraron hasta lo inimaginable depositado en calles de los diferentes barrios.

Incomprensiblemente, los elementos hasta parecían estar allí casi puestos premeditadamente para obstaculizar la circulación del agua, en una repudiable muestra de desprecio hacia los derechos de los demás.

La imagen que ilustra esta nota es una elocuente muestra de lo observado: un enorme colchón, colocado sobre el cordón, impidiendo que pase el agua.

"Durante la noche han sacado infinidad de elementos que complican el funcionamiento de las bocas de tormenta y el escurrimiento del agua", expresó indignado el intendente.

"Le pedimos a todos que tengan la precaución que requiere el caso", requirió Guillermo Britos, apelando a la buena voluntad y la sensatez de los vecinos.