Con la imposición de su nombre a una calle de nuestra ciudad -un merecido homenaje realizado este viernes- el nombre de Francisco José Falabella volvió a tomar vigencia.

Buena parte de las nuevas generaciones desconoce o ignora quién fue este destacado y renombrado vecino de Chivilcoy, al que cariñosamente apodaban "Ñato".

Resumir su vida en pocas palabras no es tarea sencilla, porque su trayectoria fue amplia.

No hace mucho -en enero pasado- el periodista Alberto Amato, lo trajo a la memoria nacional en una nota publicada en Infobae, en la que recordó una de las tantas particularidades del chivilcoyano, que bien vale tener presente a manera de ejemplo del grande hombre que nos convoca.

Escribió Amato:

"En el congreso de 1973 ocupó una banca un hombre del partido Conservador: Francisco José Falabella.

En una sesión quiso hacer un homenaje a Sarmiento y la bancada del peronismo mayoritario le tiró un camión encima.

Pero cuando le tocó hablar, Falabella abrió su portafolios, sacó una Bandera Nacional y la extendió sobre su bancada.

Casi lo linchan, pero el gesto espectacular había conseguido el homenaje a Sarmiento".

Así era el "Ñato".

Falabella nació en Chivilcoy, el 4 de junio de 1920.

Fue Comisionado Municipal; juez Penal del Departamento Judicial Mercedes; diputado provincial, a comienzos de la década de 1960 y diputado nacional, entre 1973 y 1976.

Sobresalió como docente e incursionó en el periodismo, entre una amplia variedad de responsabilidades, en las que supo destacarse.

Murió el 11 de febrero de 1998, a los 77 años.

Foto: "El Ultimo Caudillo".