Jesús Leonardo Aquino, de 21 años de edad, fue detenido por la Policía por agredir con un elemento contundente a un inspector de tránsito, en un operativo que se realizó en la intersección de la ruta provincial 30 y acceso José León Suárez.
Aquino se movilizaba en una moto Corven 150, sin patente.
Al observar el operativo -en una incomprensible actitud patoteril- comenzó a producir las típicas y molestas explosiones, que habitualmente efectúan algunos enajenados conductores con su rodado, con afán de perturbar. Todo un clásico chivilcoyano.
Al tratar de ser aprehendido, Aquino emprendió la retirada hacia el acceso Juan Domingo Perón, ubicado a corta distancia.
En el lugar, fue alcanzado por el agente de tránsito Darío Butrón.
En una muestra de cobardía -propia de pendencieros sin códigos ni valores- Aquino esgrimió un hierro y atacó al funcionario municipal, golpeando y lastimando una de sus piernas.
Inmediatamente, dejó abandonada su moto e intentó huir, pero fue rápidamente reducido por la Policía.
Aquino tiene ahora una causa penal en su contra de la que no le será fácil escapar y, menos aún, intentar arreglarla a los golpes.
Una muestra de descontrol y locura ciudadana, que requiere inmediato endurecimiento de sanciones, para poner límite al vandalismo que muestra el tránsito local, que progresivamente se va adueñando de las calles de nuestra ciudad, dejando un tendal de innecesarias victimas.
