Por Esteban Arias.

Las escuelas de Chivilcoy están en silencio.

Las aulas permanecen vacías.

La emergencia sanitaria hizo desaparecer la cotidiana presencia de docentes y estudiantes.

En los establecimientos educativos la vida se apagó de repente, como en otros tantos lugares.

Luego de semanas de extensa pausa, el renacer parece asomar poco a poco.

Indefectiblemente, el día del regreso llegará en algún momento.

Para ese instante, es bueno estar bien preparados.

Así lo sienten y lo viven los integrantes de la Corriente Clasista y Combativa (CCC) de Chivilcoy, quienes solidariamente se abocaron a la tarea de comenzar a preparar las instalaciones de la Escuela Primaria 7 (foto), para la llegada -algún día no muy lejano- de los alumnos que allí forman su futuro.

Reparación de las paredes externas e internas, trabajos de limpieza y pintura; refacción de las aulas.

Todo está en las manos de esas mujeres y hombres que, con dedicación, entusiasmo y compromiso, se arremangan para llevar adelante los trabajos de embellecimiento.

Ellos también están educando.

Lo hacen con uno de los mejores ejemplos: el trabajo digno.

Una incondicional muestra de ayuda, apoyo y compañerismo.