La jornada inicial de vacunación contra el COVID en Chivilcoy, dejó un sabor amargo para la comunidad en general y mostró -una vez más- las miserias políticas de algunos de sus dirigentes, en calidad de funcionarios transitorios del Estado.

Esas primeras vacunas, deberían haber estado reservadas -única y exclusivamente- para el personal de salud, que presta servicios en las lineas más expuestas de atención médica, entre ellas la Unidad de Terapia Intensiva del Hospital Municipal.

Sin embargo, eso no fue lo que ha sucedido exactamente en nuestra ciudad.

Entre los primeros 25 inmunizados, fueron vacunados varios "acomodados", que nada tienen que ver con el sistema de salud.

Hay algunos "favorecidos", cuya principal y particular cualidad es ser "activista político".

El lamentable y repugnante episodio, fue confirmado por el intendente municipal, tras haber tomado estado público varias denuncias, entre ellas la de un reconocido médico que presta servicios en el propio Hospital, quien manifestó su indignación, expresando "no reconocer a varios de los vacunados".

Según confirmó Guillermo Britos el listado que se había preparado para vacunar, no tenía cargado únicamente el nombre de profesionales, sino había administrativos y empleados que cumplen otra función.

"Hasta un fotógrafo" figuraba en la nómina, aseguró el jefe comunal.

¿De quién fue la responsabilidad de semejante aberración?

El intendente explicó que "es un listado provincial, que en Chivilcoy decidió la Región Sanitaria décima".

Este organismo, con sede a metros del Hospital, depende del Ministerio de Salud de la provincia.

"No es lo que debe ocurrir", reconoció el intendente de Chivilcoy y adelantó que la situación fue aclarada luego de una conversación que mantuvo con el viceministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Nicolás Kreplak.

Aseguró Britos que a partir de este lunes 4 de enero, se vacunará a los profesionales que "realmente están trabajando en el área COVID, guardia, anestesistas, clínica médica y terapia intensiva".

"Cualquier persona que tenga turno para vacunarse (este lunes 4) si no está entre los empleados de salud, que no vaya, porque no va a ser vacunado", destacó el intendente.

Por su parte, el secretario de Salud, doctor José María Caprara, reforzó los dichos de Britos indicando que "en la primera jornada se presentaron, con turnos, personas que no están abocadas a la pandemia".

"Por directivas locales, de los representantes del Ministerio (de Salud), nos dijeron que se tenían que vacunar. Por supuesto se vacunaron, porque estaba esa determinación", reconoció Caprara.

"Ahora, nosotros tenemos la potestad de poder filtrar cuando ocurren esos desfases, porque los que dan los turnos no conocen al personal", agregó.

"Al que no es de salud se le va a avisar que no puede ser vacunado, porque la prioridad está para el personal de salud", dejó en claro Caprara.

La experiencia de Chivilcoy es solo una diminuta muestra del patético uso político que las autoridades bonaerenses -en algunos casos- hacen de la pandemia y de la falta de aptitud para llevar adelante una campaña de vacunación.